Descripción
La silla es un objeto que trasciende su propia utilidad. No es estrictamente otra pieza de mobiliario. Para que un objeto sea realmente una silla debe tener establecido un vínculo afectivo con la persona que la usa. Las sillas vienen en múltiples formas y todo el mundo puede reconocer algunas entre ellos, pero la representación de la silla, la mítica silla, solo puede ser mostrada por el medio que es más esencial: la arquitectura. Por ese motivo, hemos seleccionado este -esquemática y sin adornos, casi su mismo esqueleto- para representar a todas en este juego de las sillas.
Al jugar con las sillas, nos dejamos llevar por la necesidad de experimentar, lo que nos provoca sensaciones inquietantes, difíciles de expresar y que de otro modo, pasarían desapercibidas.
Mientras jugamos, actuamos por instinto, intuición, guiados por recuerdos, sentimientos y descubrimientos que nos sacan de rutinas y comportamientos predecibles. Más que una actividad intelectual y sofisticada, la meta es jugar y ver como la construcción nos sorprende por su belleza, su audaz equilibrio, la extrañeza de sus formas, etc. Inevitablemente surgirán preguntas sobre el lenguaje poético, y aunque puede que no se de respuesta a dichas preguntas, continuaremos disfrutando del juego con curiosidad.